El valor del silencio

31 agosto 2009

Porque el silencio en sí mismo ya tiene sonido y significado
deberíamos convocarlo con más asiduidad.
Son terribles los ruídos a los que nos sometemos diariamente
en calles, bares, carreteras....
contínuos los gritos de la gente para expresarse
alarmantes los decibelios en plazas y esquinas por donde asoman
todo tipo de obras.

Reivindiquemos el valor del silencio
como regla básica para escuchar al que tenemos enfrente.

Guardamos silencio cuando no sabemos qué decir,
guardamos silencio ante los muertos,
guardemos también silencio para los verdaderos sonidos
que son los que nos van a marcar el camino
en un mundo que no encuentra su voz.

Guardemos silencio para que el propio silencio hable.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buena, felicidades.

Anónimo dijo...

sssssss...


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