El valor del silencio

31 agosto 2009

Porque el silencio en sí mismo ya tiene sonido y significado
deberíamos convocarlo con más asiduidad.
Son terribles los ruídos a los que nos sometemos diariamente
en calles, bares, carreteras....
contínuos los gritos de la gente para expresarse
alarmantes los decibelios en plazas y esquinas por donde asoman
todo tipo de obras.

Reivindiquemos el valor del silencio
como regla básica para escuchar al que tenemos enfrente.

Guardamos silencio cuando no sabemos qué decir,
guardamos silencio ante los muertos,
guardemos también silencio para los verdaderos sonidos
que son los que nos van a marcar el camino
en un mundo que no encuentra su voz.

Guardemos silencio para que el propio silencio hable.

Las estaciones

25 agosto 2009




Se va el verano.

Las estaciones nos cumplen, nos pasan, nos suceden;
son como carruseles en días de feria,
giramos y alcanzamos lo más alto
para luego pisar suelo firme con más fuerza
sabiendo que los sueños
se quedaron prendidos en alguna perezosa nube.
A través de las estaciones vivimos el curso de la vida
con todo nuestro caudal fluyendo a borbotones.

Lo que nos sobra y lo que nos falta

01 agosto 2009


Nos sobra prepotencia, envidia, rencor y falsa vanidad.
También nos sobran todos los caminos que nos lleven a las malas formas,
a la estupidez y al orgullo que nos hacen cada día más pequeños,
tristes y grises.
Vamos a luchar por lo que nos falta, por las sonrisas, la paciencia,
la ternura y los nuevos valores, la cordialidad y las ilusiones que
tanto nos engrandecen el alma.
Busquemos de paso la sabiduría y humildad necesaria
para comprender que estamos aquí de paso, y que todo
lo que somos y tenemos puede cambiar en un sólo segundo
por la fatalidad del destino.

Sobre lo que escribo

 
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